Anunciada nueva normativa de la Fórmula 1 para 2014

También lo sopesó la FIA, tras su éxito en Internet
La FIA acaba de anunciar esta mañana a las 12:00, después de haberse reunido durante más de 14 horas en una reunión con alcohol, sexo y donuts de chocolate, la nueva normativa de Fórmula 1 que espera solucionar los importantísimos problemas de ruido y rendimiento detectados por los Fans de la Fórmula 1 y que hacen peligrar todo el sentido de la competición.

Para ello, con carácter inmediato, los coches de F1 cambiarán sus motores por otra versión, llamada F-1 como no podía ser de otro modo, más potentes que darán a la Fórmula 1 el carácter de velocidad y prestigio que los anteriores V6 Turbo han dejado por los suelos.

Esquema básico del motor F-1 (Fuente)

Este motor, según palabras de los dirigentes de la FIA, proporcionará el espectáculo que los verdaderos seguidores de la Fórmula 1, que han estado bombardeándonos con cartas, palomas mensajeras y señales de humo sobre el bochornoso espectáculo que han producido los V6 Turbo introducidos este principio de año. Ecclestone, mandamás de verdad de la Fórmula 1, ha visto estos cambios con buenos ojos y ya esta buscando maneras de sufragar el pequeño sobrecoste de la introducción de estos motores a los coches actuales, soluciones cómo esconder un dígito aleatorio de los tiempos por vuelta de los Live Timings que se revelaría por un módico precio, o visto que el sonido real de los Fórmula 1 son primordiales para los espectadores de la F1, está preparando atracciones ambulantes en todos los paddocks del campeonato para poder disfrutar en todo su esplendor del sonido de estos nuevos motores.

Aficionado disfrutando del sonido de los nuevos motores F-1
Además, Bernie Ecclestone ha indicado que gracias a estos cambios, ya esta planificando nuevos emplazamientos de Grandes Premios y Tilke ya esta trabajando en sus diseños, como La Luna en 2018 o Marte 2020.

De joder a estar jodido


¿Os acordáis de los pantalones cagaos? Moda absurda donde las haya, tal vez venían para poder fardar de marca de calzoncillos, o de prueba empírica de que se tiene control de esfínteres, pero ya casi nadie se acuerda o directamente no se asusta de ver algún elemento de esta guisa. Lo mismo ha pasado con los penes de la Fórmula 1.